jueves, 2 de octubre de 2008

MUJIgatos

Somos un colectivo especial, esto que quede claro de antemano. Nos gusta que alguien lo haya dispuesto todo en una tienda perfecta. Nos gusta que por fin alguien haya entendido que tenemos que compartimentar y colorear todas nuestras necesidades. Que podamos ir tranquilos y cómodos por casa, por la vida. Con estas pantuflas y estos pijamas, que son de lo más normal, sin ninguna pretensión. Y compramos bolis y cajitas. Y dosificadores transparentes para el champú y para las cremas, porque así todo queda más ordenado y más neutro. Sin marcas. Y entramos con nuestros hijos y les compramos estuchecitos con rotuladores para subrayar. Para subrayar, ¿qué? Y cuando salimos con nuestro estuche y nuestra libreta, todo ordenado en una bolsita con cremallera que nos ha parecido de lo más cómoda, nos sentimos un poco más tranquilos. Así, todo en su sitio. Y no hay que preocuparse cuando todo se nos desordena y no encontramos la libreta ni el estuche ni el boli, qué va. Sabemos que tenemos cancha, que podemos volver a esta tienda tan perfecta, convencidos de que ahora nuestras necesidades y obligaciones son distintas y que claro, requieren otra libreta, otro estuche y otro boli de otro color. Y allí estamos, MUJIgatos, sintiendo, aunque solo sea un ratito, que podemos compartimentar, ordenar y colorear nuestros días. Que así quedan más monos, ¿no?

1 comentario:

juliet dijo...

Ariadna, he de confesarte que es la primera vez que hago un comentario en un blog. Soy medio adicta a los mails, que me parecen además tan fáciles... Las contraseñas, los registros y las palabras estas distorsionadas tan curiosas que hay que verificar me plantan un poco de cara. Y luego la idea de que alguien pueda leer lo que te escribo no tengo del todo claro que me guste.
Pero aquí estoy sobre todo para aplaudir tu "dicho y hecho" (todo lo contrario de mí, que me he echado para atrás con lo de la web). Y también para decirte cosas que te diría por mail, como que yo también lo pasé bien el miércoles y, antes de que me lo dijeras, sabía que tú también. Que te vi ilusionada con tu posible proyecto y la prueba está en que hablamos de cosas prácticas, de detalles reales y concretos. Sólo falta que con un poco de serenidad acabes de valorar esta ilusión, que es la esencia de cualquier cosa que uno emprende, y si el balance es positivo, pues como con el blog, dicho y hecho, endavant!
De la monstrua no voy a hablar porque sólo se me ocurren tópicos y realmente creo que su presencia es sólo parte de un proceso, el proceso de hacerte fuerte y de descubrirte.
¿Hay que despedirse en un blog? No tengo ni idea!
Bueno, ya ves, aquí estoy. Abrazo